Trabajadores de Radio El Mundo denuncian abusos, maltratos y precarización laboral

En el marco de la dura batalla que estamos dando todos los trabajadores de prensa contra los atropellos de patronales que no escatiman recursos a la hora de violar sistemáticamente la dignidad y derechos de sus empleados, la Comisión Interna de Radio El Mundo denuncia que desde hace meses, quienes desarrollamos tareas en la histórica AM 1070, venimos siendo víctimas de un vendaval de abusos y maltrato laboral encabezado por Jorge García, gerente periodístico de la señal. Este señor goza de un oscuro historial al respecto en cada una de las empresas por las que dejó sus huellas, especialmente en MinutoUno, donde fue responsable del despido de dos delegados que ya fueron reincorporados vía judicial.

Desde que pisó las oficinas de Gorriti 5995 García se propuso, siempre con sus modos castrenses, no reconocer la representación gremial elegida por legítimo mandato de los trabajadores, luego pretendió trabar blanqueos y categorizaciones (Art. 7 y 24 Convenio 301/75 de Prensa Oral y Escrita) que la firma debía realizar hacía meses y fueron concretados finalmente por legítima presión de la junta interna. Ante ese panorama sombrío comenzó a imponer un plan de quite de tareas en el área del informativo dejándolo, por ejemplo, sin el manejo de su sistema de redes sociales que colocó en manos de la agencia ARG Noticias, un portal que se anexó a la radio con la intención de llevar adelante multifunciones y convergencias precarizadoras.

De ahí en más empezó un esquema represivo basado en permanentes malos tratos para con productoras/es, cronistas de exteriores, delegados, conductores de programas que fueron desplazados de manera poco feliz, y hasta el repudiable aprovechamiento de la licencia por embarazo de una compañera, para sacar del aire un ciclo periodístico del área informativa de la emisora con más de cinco años en la programación de la 1070. Decisión que tomó sin siquiera dar aviso ni especificar la tarea que cumplirá desde ahora nuestra colega. García además intentó que no se realizaran las correspondientes suplencias por enfermedad o vacaciones de los compañeros, algo que supera todo lo establecido en materia de violaciones a estatutos y convenios laborales (Art. 23 Convenio 301/75).

Remarcamos que todos estos graves abusos se ejecutan mientras García no dio solución a ninguno de los incumplimientos que la empresa lleva adelante, entre ellos, sólo por nombrar algunos: pago obligatorio de refrigerio (Art. 45 Convenio 301/75), solución a la problemática de la movilidad de los Cronistas y pago de viáticos en tiempo y forma (Art. 13 Convenio 301/75), Plantel Mínimo de Personal de Redacción (Art. 3° inciso a) Convenio 301/75), Provisión total de los elementos de trabajo para personal de planta y suplentes, que además deben estar blanqueados para poder desarrollar su actividad con credenciales e igual cobertura laboral (ART, Obra Social y Aportes Jubilatorios) que los empleados permanentes (Art. 26° Convenio 301/75), de la misma manera, debe estar regularizada la relación laboral con la empresa de todos los trabajadores de prensa que cumplen funciones en los programas de la emisora, que están actualmente en negro bajo el manto irregular de las subcontrataciones, y quienes gozan de la cobertura del Art. 11° del mismo convenio que nos asiste.

Por tales motivos exigimos a las actuales autoridades responsables de Radio El Mundo de Buenos Aires que tomen cartas urgentes en el asunto y hagan cesar los continuos atropellos del gerente Jorge García para con todos y cada uno de los trabajadores de la señal, y por supuesto den cumplimiento a todo lo notificado y solicitado en este Comunicado. De no recibir respuestas positivas a la brevedad realizaremos asambleas donde analizaremos las consecuentes medidas que sean necesarias para que se nos dé el trato respetuoso que merecemos y se atiendan todos nuestros reclamos. Lo pedimos como trabajadores que ejercen su profesión diariamente con total responsabilidad, oficio y buena voluntad, y que además nunca antes tuvieron que atravesar semejante e indigna situación.